Ruth estudió Magisterio de Educación Especial. Su iniciativa ha recibido, entre otros reconocimientos, el 1.er Premio «Jóvenes con Valores» de “la Caixa”.

Desde que era adolescente, empezó a interesarse por los temas sociales y decidió implicarse en la ayuda social a personas con discapacidad. Se acercó, así, a la Fundación Ludàlia, a través de la cual impulsó el proyecto «Discoteca Ludàlia», para que los jóvenes con discapacidad intelectual pudieran disfrutar de un ocio normalizado y de calidad. La idea tiene su origen en Consol Ferrer, fundadora de la institución, que hace más de veinte años ya detectó la falta de ocio para estas personas.

Ruth Ruiz tardó casi un año en conseguir una discoteca que les permitiera celebrar una sesión de baile todos los domingos. Algunos promotores ni siquiera se mostraron dispuestos a recibirla, hasta que Fede Sardà, propietario de la mítica Luz de Gas, les abrió sus puertas. De eso hace ya más de diez años.

«Los domingos, la familia no pasa de la puerta: es el espacio de los chicos, y todos son mayores de edad. En la discoteca hay educadores que ayudan a gestionar cualquier demanda de los asistentes», explica el educador Jordi Santamaría.