Soleá Morente: «Recibo el premio con muchísima ilusión, alegría y agradecimiento eterno»
junio 15, 2018
La cantante es la ganadora del Premio Fundación Princesa de Girona Artes y Letras 2018, junto con Pablo Ferrández.

Nacida en el seno de una familia de artistas, Soleá Morente ha sido reconocida —ex aequo con Pablo Ferrández— con el Premio Fundación Princesa de Girona Artes y Letras 2018 porque es «una artista completamente genuina y con capacidad para liderar proyectos musicales en un mundo a menudo difícil para las mujeres», según destacó el jurado cuando dio a conocer su nombre, en un acto presidido por S. M. la Reina que tuvo lugar en el Centro Cultural Alcazaba de Mérida en febrero de este año. «Cuando me lo dijeron, ¡no me lo creía! Lo recibo con muchísima ilusión, alegría y agradecimiento eterno», resalta la cantante de flamenco y pop rock Soleá Morente (Madrid, 1986), que también tiene palabras de elogio para la Fundación Princesa de Girona y la labor que esta entidad lleva a cabo. «Para mí es esperanzador que haya fundaciones como esta, con personas que tienen ganas de ayudar a los jóvenes y que trabajan para aportar soluciones a la sociedad en la que vivimos», subraya la madrileña, que se siente «muy orgullosa de formar parte de los premiados de la Fundación».

El jurado, presidido por la periodista Montserrat Domínguez, estaba integrado por el escritor, periodista y cineasta Luis Alegre, el empresario y productor teatral Jesús Cimarro, el director artístico del Palacio de la Música Catalana Víctor Garcia de Gomar, el arquitecto Rafael Moneo, la cineasta Gracia Querejeta, el director de la Joven Orquesta de Extremadura y Premio FPdGi Artes y Letras 2016 Andrés Salado y la actriz Maribel Verdú.

Morente ha publicado en este 2018 su tercer trabajo, Ole Lorelei, que llega después de los éxitos de Encuentro y Tendrá que haber un camino. Una carrera musical que la joven empezó al finalizar sus estudios de filología hispánica en la Universidad de Granada, siguiendo así los pasos de su padre, el cantaor Enrique Morente, y de su hermana, la cantante Estrella Morente.

Música en las venas
«Mi padre y mi hermana son dos de mis grandes referentes. Y recuerdo como, en casa, todas las fiestas se celebraban a través de la música», rememora la cantante, que también confiesa que cuando era pequeña le encantaba «cantar y bailar y participar en los encuentros familiares». Unos orígenes que la han marcado tanto a ella como a sus dos hermanos. «Los tres hermanos nos dedicamos a la música, porque cuando lo vives desde pequeño y la música se lleva de manera natural, es casi inevitable». Y es que desde niños sus padres ya les enseñaban «a llevar el compás, a batir palmas, y eso lo veíamos en mis tíos, en los hermanos, en los amigos».

Una vida rodeada de música en que la figura de su padre tuvo un papel protagonista. «Mi padre tenía un espíritu transgresor e inquieto; continuamente estaba innovando y buscando nuevas soluciones y, al mismo tiempo, siempre reivindicaba el amor por la tradición y por sus raíces. Eso me ha marcado y determinado a la hora de hacer mi trabajo». Una de las frases que más recuerda de él es una máxima que le repetía a menudo, y que a ella le encanta: «Sin riesgo, no hay creatividad».

Para Morente, además, uno de los logros más importantes de su progenitor es haber acercado el cante flamenco «a nuevos públicos, a todas las edades, en otros idiomas». «Fue un ejemplo de valentía», apunta. Pero no es el único familiar que la ha marcado. También su hermana Estrella ha tenido un papel fundamental: «Es un ejemplo a seguir; la admiro profundamente, es una grandísima figura y siempre le pido opinión, consejo».

Y, sobre todo, tiene bien grabada en su memoria una frase que su padre le dijo cuando acabó los estudios de filología y aún no sabía si dedicarse a la música: «No tengas miedos ni prejuicios, y haz lo que te haga sentir bien. Y cuando lo decidas, la preparación y el conocimiento serán tus mejores herramientas». Un consejo que ella, ahora, da a todos los jóvenes para que elijan su camino «sin miedos».